Coordinación Motora Infantil - Desarrollando en su Tiempo
Bebé y recién nacidoDado el nombre de coordinación motora, la habilidad de mover los músculos de forma precisa, dando total dominio corporal. Es posible observar condiciones de la coordinación motora infantil a través de actividades rutinarias como al jugar, al dibujar e incluso al caminar. Cuando un bebé nace, pasa más tiempo durmiendo que interactuando. Y eso va cambiando con el paso de los meses, cuando comienza a quedarse más tiempo despierto mirando en cada detalle a su alrededor. A lo largo de los meses, adquirirá habilidades como sostener algunos objetos, tirar y hasta llevarlo hasta la boca.
El desarrollo de la coordinación motora ocurrirá de forma natural y obviamente necesitará estímulos para que el resultado sea aún mejor y dentro de lo esperado. Pero los estímulos deben ser hechos con cierto cuidado y aprehensión, dentro de un límite para que no sea forzado a hacer demasiadas cosas para su fase. No hay mejor manera de desarrollarse, que a través de la broma. A través de canciones infantiles, pinturas y cualquiera que sea la broma favorita del niño que hará que se desarrolle con placer. Es la coordinación motora infantil que permite que el niño consiga bailar, saltar y hacer tareas que van a perfeccionarse cada día más como escribir y usar una tijera para recortar un papel.
Se divide en dos categorías, la coordinación motora gruesa y la coordinación motora fina. Donde la gruesa es determinada por los movimientos musculares de los miembros más grandes donde definen los movimientos más hábiles como correr, saltar, subir escaleras y patear. Ejercicios muy utilizados en actividades deportivas, y que algunos niños presentan más dificultad en esos movimientos.
La coordinación motora fina es la de músculos menores, como manos, dedos y pies. Se comprueban a través de la pintura y manipulación de materiales como lápices, canetinha y tijera. Exigir movimientos más firmes y delicados, debiendo ser más precisos, movimientos que se utilizar durante toda la vida.
Coordinación Motora de 0 a 6 años de edad
Es en la educación infantil que la coordinación motora infantil será más trabajada y estimulada. Con ayuda de actividades bien elaboradas y dinámicas es posible recibir respuestas inmediatas y siendo así pudiendo evaluarlas. El desarrollo de la coordinación motora se inicia junto al nacimiento del bebé. La maduración es esencial para que el niño pueda tener interés por los objetos a su alrededor y recibir el estímulo para estirarse para recoger, apretar y tirar. Con el paso de los meses, esos movimientos serán cada vez más perfeccionados dando oportunidad a buscar nuevos aprendizajes.
Cuando comienzan a crol en torno a los 6 a los 10 meses de vida, el espacio tan limitado anteriormente ahora es más amplio y con mucho más posibilidades de explotación y desarrollo de la coordinación motora. En el caso de los muebles, escalan los sofás y se mueven en todo y eso mejora cada día más sus músculos fortaleciendo para el mejor control y coordinación de brazos, piernas y manos, incluso ya se sientan, se ven y se levantan sosteniéndose cada día con más facilidad.
Cuando finalmente consiguen quedarse de pie solo y andar llegando a su casa primer año de vida, la coordinación motora gruesa esta empezando a mejorarse. A partir de este momento, deberá trabajarse para evolucionar cada vez más. A través de un tenedor para tratar de alimentarse solo o dar una tiza de cera para dibujar es posible estimular la coordinación motora fina, perfeccionando cada nuevo intento el control de las manos.
La broma sea cual sea siempre será un ejercicio constante para la mejora de la coordinación motora infantil. Por ejemplo, al empujar un juguete, el niño trabaja más allá de las piernas y brazos los ojos, que tiene que estar atentos a donde va mientras se esfuerza para colocar el juguete adonde desea. Por eso es indicado que niños jueguen en la voluntad, sin imponer límites y espacio. Deja explorar el lugar, obviamente con el máximo cuidado para evitar accidentes domésticos, pero deja jugar con los juguetes que quieres empujar, desmontar, esparcir y unir.
En la fase de los 2 años, el niño ya consigue moverse sola y con firmeza. Ya explora y sabe lo que le gusta hacer. A través de dibujos, garabatos de colores muestran la inmadurez de la coordinación fina y la falta de control de las manos y raciocinio. En esa fase, pintar con sus deditos es una forma de aprender a lidiar con los movimientos de forma más firme. Responden bien el lenguaje corporal, a través de la música logran moverse de forma más firme.
Ya cuando hay mayorzinha, en la fase de los 3 a 4 años, además de la broma, los descubrimientos y ejercicios se vuelven más intensos. La muñeca que antes era sólo abrazada y balanceada para "dormir", ahora consigue recibir papillas en la boca. El carro que antes era sólo empujado hacia adelante y hacia atrás, ahora hace maniobras y ya posible hasta encarar un mando a distancia y sus botones. Los movimientos y la coordinación motora infantil se van adecuando a su fase, conforme su crecimiento. En la escuela, consiguen hacer dibujos más expresivos y de fácil comprensión, diferente de los garabatos del inicio. Los dibujos toman formas y ya es posible hacer recortes con tijeras y dibujos de punteados son los preferidos de los niños.
para 5 años la gran mayoría de los niños ya posee gran control de la coordinación motora. Pueden manejar con seguridad un bolígrafo o un lápiz. Utilizan tijeras de forma precisa y hacen movimientos corporales con equilibrio, incluso consigue ya andar en bicicleta siendo en algunos casos hasta sin rodilla para auxiliar en el equilibrio. Consiguen bailar, saltar y correr con más precisión. Ahora será momento de perfeccionamiento de la coordinación motora fina, necesitando un control más delicado de las manos. Cuando el niño alcanza los 6 años de edad, se inicia la alfabetización. El entrenamiento intenso con tiza de cera, lápices de colores y canetinhas desde pequeñocito, ahora serán intensificados con el uso del lápiz de escribir. De forma precisa las letras deberán surgir en el cuaderno, primero las letras de forma y los números, con el paso del tiempo la letra extensa deberá ser aprendida completando esa fase de aprendizaje y evolución de la coordinación motora infantil.
Los niños se desarrollan y aprenden nuevas habilidades en tiempos diferentes. Por eso no se debe ser cobrado ni comparado con el desarrollo de los demás. Si se observa algún retraso perceptible incluso por profesores, el pediatra deberá ser consultado para acompañamiento.
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Foto: Riana Ambarsari, nmoira