En un mundo que los valores andan invertidos y el respeto se ha convertido en una pieza rara, una táctica de educación tan antigua entra en discusión y gana hasta una ley para fortalecerse. Si existe un asunto que genera controversias es ese: palmada educa o deseduca?

Para algunos, la palmada es una corrección, una forma de padre o madre de educar y mostrar que el niño está haciendo algo mal. Para otros es una manera prehistórica de enseñar y todo lo que consiguen es enseñar la violencia al pequeño en formación. La polémica se divide en opiniones totalmente diversificadas, que van desde aquellos que son totalmente contra cualquier tipo de agresión física, sea una palmada en las nalgas incluso un tirón de oreja hasta aquellos que están a favor de la corrección con "una tapa en el trasero".

Fuimos a fondo de esta cuestión y preguntamos a los padres aquí en el cambio de pañales. Antes de ser necesaria una intervención educativa, necesita un desacuerdo. Es interesante que padres e hijos discrepen o con frecuencia o raramente. Cerca del 52% de los casos casi no tendrían mayores problemas con los niños. En la mano, otro 31% tendría problemas varias veces al día con sus hijos. La minoría tendría problemas una vez por semana y otro 11% alguna fricción con los niños una vez al día. ¿Cómo será entonces que esos padres hacen para eludir esas situaciones?

Cómo actuar como Padre o Madre?

Una vez que discrepan, qué puede hacer para eludir la situación? Mientras la solución tradicional, la palmada no desapareció completamente del repertorio educativo, es nítido que los tiempos han cambiado. La preferencia de resolver este tipo de situación es en las formas no violentas. la su preferencia es cambiar el tono de voz. Mostrar un tono más firme señala al niño que tiene algo equivocado. La conversación más tranquila y explicativa, que puede incluso seguir un cambio de vez, también es una de las formas de solución más escogida. El diálogo es importante para mostrar cierto e incorrecto y también ejemplificar situaciones. La mayoría de las veces, este proceso es mejor recibido por los niños mayores. Pero con los menores puede haber dificultades de comprensión. Independientemente de eso surtiría algún efecto, al menos muestra una ternura a la hora de corregir una falla.

El famoso "castigo" hoy no tiene más tiempo en familias con niños pequeños. Los padres adoptaron otras formas de enseñar a los niños. Realmente tomar beneficios y objetos, que a los niños les gusta mucho, puede ayudar en la educación pues así ella tendría una buena razón para pensar en lo que hizo de "mal". En vez de privar al hijo de algo, podría incluso ofrecer otro. Sin embargo, nuestros entrevistados no se mostraron muy afligidos con esta alternativa. Para muchos padres, eso significaría una derrota educativa porque necesitan "comprar" al niño para hacer lo que ellos quieren. Esto puede ocasionar otros problemas en el futuro cuando el beneficio debe ser cada vez mayor.

¡Por fin la palmada! Ella, que por muchos es abominada, todavía tiene tiempo en las familias brasileñas. No es que palmada para esos padres signifique palizas, sino una forma de llamar la atención aplicada como último recurso. Algunos psicólogos defienden la tesis de que los niños que sufren corrección a través de la palmada no aprenden la lección, y que no se sienten como si estuvieran en el mismo lugar. Lo que debería ser respeto termina volviéndose miedo, será incluso?

En la actualidad, el método de educar a los hijos es base de la conversación, del buen diálogo y si aún así no se ven resultados, el castigo se aplica. Los niños pierden momentáneamente su videojuego, móviles, juegos y afines a cambio de su mal comportamiento, con el fin de que vean el error cometido. Algunos padres utilizan el argumento de haber sido creados a base de palmadas y serían muy agradecidos por la educación. Por eso quieren pasar la misma enseñanza para sus hijos. Ya otros sacan sus conclusiones y cambian sus métodos educativos justamente por no aceptar la forma que fueron corregidos y castigados en la infancia, alegando que se traumatizaron con eso.

Lo que dice la Ley con Respeto a Palmadas

Otra gran discusión relacionada con el tema es sobre límites de la palmada. Una tapa en el trasero es menos agresiva que un tirón de oreja o de una pata de cinta? En cuanto a la falta de control de esas palmadas correctivas y viendo un gran número de niños siendo agredidos físicamente todos los días, un proyecto protegiendo y prohibiendo la palmada educativa y cualquier otro tipo de corrección física o de trato cruel fue creada.

la Ley 13010/14 del Estatuto del Niño y del Adolescente que fue aprobada recientemente por el senado, busca castigar a padres o responsables que usen de la fuerza física para educar a sus hijos a sufrir una advertencia, pasar por cursos de orientación y pasar por acompañamiento psicológico. Muchos senadores se opusieron a la ley, creyendo que los padres quedarán vulnerables a denuncias y acusaciones falsas, obligatoriamente pagando por un error sin fundamento.

La discusión se extiende hasta la población, dividiendo opiniones y visiones ya formadas. Cuestiones sobre como educar a un hijo sin poder dar una palmada cuando es necesario es muy común cuando se toca en el asunto, ya que en ciertas situaciones como un niño mover en la toma o subir en una ventana no se resuelven con un simple "no puede hacer eso". ¿Pero la palmada se resuelve? ¿El niño entenderá por qué no puede volver a hacer eso? Sólo el 4% de los padres entrevistados creen que sus hijos van a aprender. El 69% considera con una herramienta utilizada ocasionalmente cuando otros intentos de imposición de la voluntad fracasaron como último recurso. Para uno de cada cuatro madre y padre, la palmada no educa, lesiona y no puede ser solución alguna.

Los expertos en comportamiento infantil afirman que la conversación y la explicación del error cometido es mucho más válida que una chinelada o una palmada. La psicóloga Super Nanny aconseja el método del ""el canto de la disciplina", donde el niño debe ser colocado en un espacio reservado para que piense en lo que hizo mal, pero no todos los padres vean beneficios en ese método creyendo que el niño sólo tiende a quedarse aún más nerviosa en el tiempo que debería pensar.

El proyecto de ley fue aprobado el 4 de junio de 2014 por el senado y en el momento aguarda firma del presidente para liberación, pero mucho ya se habla de los derechos y castigos. Muchos todavía pelean y aguardan ansiosos por el vigor de la ley y muchos otros continúan rebelados e inconformes con una ley que retira totalmente los poderes y derechos de educar de los padres.

Ver también: Violencia Infantil - Destruyendo Sueños

Fotos: Acervo Personal TF