En las primeras consultas de la vida del bebé con el pediatra se realiza la medición del perímetro cefálico. A través de esta medición es posible acompañar el desarrollo dentro de las estadísticas considerado normal para cada rango y fase del niño. Cuando se observa durante una consulta que estas medidas están por debajo o por encima del considerado normal exámenes se pueden solicitar para el análisis del caso y la constatación del problema.

La hidrocefalia y macrocefalia son algunos de los elementos de la lista de los principales motivos para alteración en el perímetro cefálico del bebé y debe ser analizado con cautela hasta llegar al diagnóstico correcto para recibir el debido tratamiento. Obviamente un padre y una madre al escuchar que su hijo puede tener el problema es espeluznante, pero saber a fondo de lo que se trata puede traer un confort mayor.

La hidrocefalia es una enfermedad que tiene como principal característica la acumulación de líquido dentro del cráneo. Este líquido también conocido como cefalorraquídeo (LCR) en exceso causa el aumento de la presión cerebral y la hinchazón de la cabeza. Es el líquido que envuelve el cerebro y la médula espinal y tiene como función proteger el área, pero cuando imposibilitado de ejercer su trabajo y bloqueado por algún motivo, causará la acumulación en la zona craneal. El exceso de líquido también puede ocurrir debido a la mala absorción del organismo y resultar en la hidrocefalia. Desafortunadamente no se ha encontrado todavía la curación de la enfermedad, pero es posible tratar y controlar la hidrocefalia aliviando los síntomas.

Existen 3 tipos de hidrocefalia y cada una de ellas está relacionada con las causas:

  • Hidrocefalia Fetal - Cuando se descubre la enfermedad aún durante la gestación, a través de la realización de la ultrasonografía la enfermedad gana el nombre de hidrocefalia fetal o congénita. El problema ocurre debido a cuestiones genéticas debido al uso de drogas o infecciones que la gestante pudo haber sufrido durante el período gestacional como la toxoplasmosis, sífilis y rubéola. Durante el desarrollo fetal ocurre la malformación del sistema nervioso central del feto ocasionando la acumulación de líquidos en el cráneo y aumentando el tamaño de la cabeza.

  • Hidrocefalia Infantil- No todas las personas con hidrocefalia ya nacen con el problema. Pero algunas adquieren luego en la primera infancia y puede ocurrir debido a tumores cerebrales, mala formación o incluso un quiste que esta imposibilitando el paso del líquido. En el caso del quiste, la hidrocefalia gana un nombre diferenciado, como hidrocefalia obstructiva donde hemorragias, sangrados e infecciones en el sistema nervioso pueden ocurrir.

  • Hidrocefalia de Presión- Los adultos también pueden adquirir la enfermedad en cualquier fase de la vida. Normalmente las personas mayores de 65 años tienen más probabilidades de desarrollar el problema, sobre todo si han tenido problemas como el accidente cerebrovascular, la hemorragia, el mal de Alzheimer y el tumor cerebral. La hidrocefalia de presión en este caso ocurre por la mala absorción del líquido por el organismo o por el aumento de su producción.

Otro problema que también es señalado por el crecimiento de la cabeza, la macrocefalia es una condición normalmente considerada como herencia genética familiar. Pero puede ser el resultado de varios otros problemas de salud y por eso debe ser investigado para el real diagnóstico. Las principales causas de la macrocefalia son:

  • hidrocefalia
  • Hematomas crónicos
  • Hemorragia Intracraneal
  • Tumor cerebral

Algunas enfermedades también pueden resultar en el crecimiento del perímetro cefálico, como es el caso Síndrome de Morquio, síndrome de hurler y la enfermedad de Canavan. El acompañamiento mensual del bebé y del niño en el pediatra tiene extrema importancia y es a través de este seguimiento que es posible detectar algún problema. Obviamente a través de la medición de la cabeza no es posible ya dar el diagnóstico correcto, pero a través de la tabla de peso y estatura es posible acompañar si algo no está dentro de la normalidad y solicitar exámenes que comprueban si algo está mal o no.

El primer paso cuando se constata el crecimiento por encima de la media es analizar las condiciones cerebrales del niño y para ello se solicita una resonancia magnética o una tomografía computarizada. A través de los resultados el pediatra evaluará el cuadro y dirigirá hacia el debido tratamiento.

Síntomas y Tratamiento de la Hidrocefalia y Macrocefalia

Tanto la Hidrocefalia como la macrocefalia tienen por su principal síntoma el crecimiento anormal de la cabeza. Sin embargo, los síntomas más particulares pueden ser observados incluso a pedido del propio pediatra para la constatación del cuadro. La hidrocefalia en bebés además del aumento craneal puede presentar dificultad en el control de la cabeza, irritabilidad, ojos bajos, vómitos, ataques epilépticos y venas de la cabeza y molleja muy dilatada.

Los niños mayores, los síntomas pueden venir con dolor de cabeza intensa, pérdida de movimientos, vómitos, incontinencia urinaria, dificultad en el aprendizaje y alteración en el habla y la memoria, el estrabismo y el crecimiento lento. En el caso de adultos que desarrollan la hidrocefalia, la cabeza no tiene el tamaño alterado, pues los huesos craneales ya se desarrollaron, pero la pérdida de memoria y la incontinencia urinaria ocurren con frecuencia.

la tratamiento de la hidrocefalia puede ser a través de medicamentos o quirúrgicos. El procedimiento quirúrgico tiene el objetivo de drenar el líquido dirigiendo hacia otras partes del cuerpo aliviando la presión cerebral. Esta cirugía donde se coloca una válvula ha ofrecido buenos retornos y calidad de vida para los niños y pacientes con hidrocefalia. Pero es necesario estar atento a señales y posibles problemas con la válvula ya que puede ser una puerta de entrada para infecciones e incluso defecto en su función.

Los síntomas de la macrocefalia son bien parecidos al de la hidrocefalia y pueden venir acompañados de falta de apetito, sueño excesivo, cambios de humor, vómito y movimientos involuntarios de los ojos. El tratamiento consiste en el alivio de los síntomas y sus complicaciones. En el caso cuando la macrocefalia ocurre debido a la hidrocefalia el tratamiento se dirige a la cuestión. Cuando se considera genético familiar no existe tratamiento indicado a no ser la contención de algunos síntomas.

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Foto: Tania VDB