Una de las complicaciones consideradas más graves del puerperio es la hemorragia posparto, que hoy en día ha disminuido de forma significativa gracias a los mayores cuidados de la medicina y al hecho de que la mujer permanece internada bajo cuidados médicos después del parto.

 La hemorragia posparto cuando ocurre es después de las primeras horas después del nacimiento del bebé, y ocurre una pérdida de sangre superior a 500 ml en el parto normal y superior a 1.000 ml en el parto cesáreo, que ocurre después de la retirada de la placenta. Se produce de forma externa y visual, pues ocurre siendo expulsada por la vagina y son originadas por el rompimiento del canal del parto o incluso del útero. Es importante advertir que es diferente de la menstruación posparto, incluso cuando con sangrado intenso.

La contracción insuficiente del útero también puede ocasionar la hemorragia posparto, junto con alteraciones en la coagulación sanguínea. También pode se produce una hemorragia interna, resultado de un rompimiento de vaso sanguíneo debido a la fuerte presión y fuerza en el paso de la cabeza del bebé.

En este caso, la hemorragia no puede ser visualizada de forma externa y sí siendo alertada por fuerte dolor en el local que deberá ser verificada por un médico. El dolor es acentuado y no para la administración de analgésicos, y tiene su confirmación con la aparición de un hematoma morado en el lugar.

Cuando la pérdida de sangre es abundante, el medico indicará la transfusión de sangre para que otros órganos como el cerebro, el corazón, los riñones y los pulmones no se ven afectados con esta gran pérdida de sangre y ser afectado también con falta de oxígeno.Normalmente la hemorragia posparto es finalizada de forma natural, desapareciendo sola, y además de la necesidad de la transfusión de sangre se administra de forma intravenosa el suero.

Hay algunos casos más graves, que estos procedimientos citados arriba acaban no trayendo la respuesta esperada y es necesaria una reparación quirúrgica del tejido dañado o incluso la retirada del útero, siendo este último procedimiento la última opción para resolver el problema. Es natural que una mujer que sufre de hemorragia posparto quedará después del hecho con un cuadro anémico y se recomienda el uso de suplementos de hierro y una mejor alimentación por algunos meses hasta la regularización del cuadro.

Otras Complicaciones Post-Parto

Además de la hemorragia posparto existen otras complicaciones que traen peligro tanto a la mujer como a su bebé y deben ser rigurosamente controladas, de lo contrario puede llevar a la muerte. Las infecciones ganan el segundo lugar entre las más graves complicaciones posparto, y así como la hemorragia, las infecciones han disminuido considerablemente debido a los extremos cuidados y rigurosa asepsia que se realiza durante el parto.

La infeción puede iniciarse en el útero, en las vías urinarias e incluso en los pulmones, los expertos afirman que la mayoría de los casos de infecciones se produce debido a la ruptura de la bolsa de agua y una espera de parto superior a las 24 horas, haciendo aumentar los riesgos de que la mamá adquiere una infección. El síntoma más evidente de una infección post-parto es la fiebre elevada y que debe ser buscado el médico inmediatamente tan pronto como se haya comprobado. En caso de que la infección no sea diagnosticada y tratada con prontitud, podrá extenderse por todo el organismo de la mujer, trayendo serios daños hasta la muerte.

Otra complicación posparto considerada bien común es la siguiente: de incontinencia urinaria. Normalmente durante la gestación la embarazada ya adquiere cierta incontinencia, debido a la presión del útero sobre la vejiga, pero esa incomodidad permanecerá por un período que puede llevar en promedio dos meses.

 El problema desaparecer solo, que puede mejorar más rápidamente si la mujer ayuda a hacer ejercicios pélvicos que pueden iniciarse ya en la maternidad. El fortalecimiento del musculo del perineo es indicado para que la incontinencia urinaria termine, pero en algunos casos debido a algunas lesiones ocasionadas durante el trabajo de parto y parto en sí, la mujer deberá buscar un especialista para verificación.

Algunos casos son necesaria intervención quirúrgica para reparaciones o sólo una consulta y tratamiento con fisioterapeuta ya resolverá la cuestión. Otro gran inconveniente considerado complicaciones post-parto es el de lesiones en los senos debido a la lactancia que pueden ocasionar una mastitis. Debido a la succión constante en los pezones junto a la saliva del bebé puede causar cortes en toda la extensión de los pezones, principalmente en las boquillas.

La mastitis no suele ocurrir en la primera semana de la lactancia, normalmente ocurre a partir de la segunda semana y presenta dolor intenso en los pezones, enrojecimiento y un calor excesivo en los senos que pueden causar fiebres y escalofríos. Normalmente los médicos indican la suspensión de la lactancia directa tan pronto como se diagnostica la mastitis, solicitando que la leche sea extraída y dado de forma que no tenga contacto con el pico del seno, aguardando la total cura para retornar la lactancia normal.

Si no se trata inmediatamente y de forma coherente puede evolucionar a una obstrucción mamaria e incluso un problema crónico. El tratamiento consiste en uso de antibióticos, pomada antiinflamatoria específica y uso de sujetador adecuado para aliviar los dolores y dar mayor firmeza a los senos. Todas las complicaciones posparto deben ser acompañadas por el ginecólogo o obstetra responsable de su gestación, en caso de cualquier síntoma diferente busque a su médico inmediatamente.

Ver también: Complicaciones en el Parto - Miedo Inevitable

Foto: Philip Beyer, Daniel Lobo