Durante muchos años se ha popularizado que los picos de insulina podrían tener efectividad en el aumento de la síntesis proteica, eso es, a través de una gran liberación de esa hormona, sería posible activar las vías celulares de síntesis y promover un mejor anabolismo a los diversos tejidos del cuerpo, incluso al músculo.

Muy común era también decir que ese proceso podría favorecer en la mejora de la síntesis de glucógeno muscular, haciendo que los inventarios fueran más rápidamente rehechos y el cuerpo pudiera ponerlos a disposición de los mismos de manera mucho más efectiva. Y tú, en lo que crees? ¿Crees que proporcionar picos de insulina favorecer su síntesis o ya piensa que eso es un mito? Vamos a entender mejor en el desarrollo de este artículo.

Índice del artículo:

  • La acción insulínica
  • El antecedente y el actual: Visiones sobre la insulina
  • La acción insulínica, la captación de glucosa y la síntesis de proteínas

La acción insulínica

La acción de la insulina tiene innumerables peculiaridades. Siendo una hormona altamente anabólica e interconectada con procesos de síntesis, esta es probablemente la hormona más íntimamente vinculada con los procesos de construcción, ya sea de compuestos o incluso de tejidos.

La insulina actúa, a grosso modo, en tejidos que tienen receptor para ella. Normalmente, los receptores GLUT-4, presentes en el tejido muscular, así como en el hígado, por ejemplo. Y eso es lo que hace que estas sean las principales células objetivo de esa hormona. La insulina se une a estos receptores activando algunas cascadas de reacciones internas que promoverán efectos desde la captación de la glucosa, por ejemplo, hasta el aumento de la síntesis proteica. De esta forma, la insulina no carga glucosa a la célula, como se suele decir, pero sí permite que la membrana pueda captar glucosa a través de ciertas señales.

El antecedente y el actual: Visiones sobre la insulina

No era inusual, y aún no es, ver atletas que suelen consumir grandes cantidades de carbohidratos, sea en los momentos post-entrenamiento o durante el transcurso del día. Muchos suelen popularizar que los picos de insulina puedan hacer los procesos católicos naturales del cuerpo menos evidentes, así como auxiliar en el aumento de la síntesis proteica. Sin embargo, a pesar de esa visión, cada vez más el contrapuesto a eso viene siendo no sólo estudiado, pero también utilizado y con eficacia, lo que es lo más importante.

Se percibe ante innumerables estudios que en nada los picos de insulina contribuyen para el aumento de la síntesis proteica o si quiere para las síntesis de glucógeno. Esta hormona es tan eficaz que parece tener una acción fisiológica suficientemente eficaz incluso en pequeñas o mínimas cantidades. Y no es por casualidad que cada vez más los carbohidratos vienen siendo retirados de la dieta de manera parcial, o por lo menos en grandes proporciones. Hoy, básicamente no se habla más de dar picos de insulina para promover tales efectos, tanto porque no se ingiere un carbohidrato de manera aislada, es decir, casi siempre será añadido a una fuente proteica o incluso lipídica dentro de una comida, haciendo con que el pico de insulina que él teóricamente daría, de hecho ocurra en proporciones mucho menores, eso es, si ocurre.

Para tener una breve noción de cómo la insulina puede ser eficaz y eficiente en cantidades pequeñas, imaginemos que uno de los aminoácidos más capaces de estimular su secreción por el páncreas es la L-Leucina. Sin embargo, ese estímulo no llega ni a los pies que si lo hiciéramos con un poco de glucosa o sacarosa. Sin embargo, los procesos de anabolismo observados son los MISMOS o incluso más efectivos con la L-Leucina.

Por lo tanto, si antes era considerable el uso de carbohidratos que dieran ese pico, hoy el escenario es muy diferente!

La acción insulínica, la captación de glucosa y la síntesis de proteínas

Para que el cuerpo pueda hacer síntesis de algo, hay la necesidad de que haya energía para ello. Normalmente, esta es fácilmente obtenida por la glucosa, que después de sufrir hidrólisis y combustión posibilita esa disponibilidad energética. Sin embargo, otros sustratos pueden ser utilizados para el suministro de energía, como los lípidos, por ejemplo.

No sería diferente entonces, a través de los aminoácidos, producir proteínas que posteriormente serán utilizadas en diversas funciones, entre ellas para la construcción o reconstrucción del tejido muscular microlesionado por los entrenamientos, o incluso por la hiperplasia resultante de ese estímulo.

Claramente, es posible percibir que la insulina recibe papel fundamental en esta síntesis proteica, por los propios efectos insulin-like.

Por esa importancia, es muy fácil imaginar que cuanto más insulina podamos poner a disposición en un período de tiempo, mejor entonces será la efectividad de la entrada de glucosa en la célula y entonces mejor será la síntesis proteica. Y no es por casualidad que lo que más vemos de popular en la suplementación deportiva es la utilización de carbohidratos de fácil digestión y que presentan alto índice glucémico con la intención de "favorecer" ese proceso. Entre estos carbohidratos, podemos citar la maltodextrina, la trealosa, la dextrosa o la propia glucosa, entre otros carbohidratos.

A pesar de este pico de carbohidratos y pico de insulina promover algunos procesos de síntesis, estos están ligados a diversos tejidos, como el panículo adiposo, favoreciendo la acumulación de grasa corporal. Además, a pesar de alcanzar el tejido muscular, éste tiene en primer lugar límites en momentos (o sea cierta producción en cierto espacio de tiempo) para la síntesis proteicas. Es como si imagináramos comer proteínas en cantidades exorbitantes para obtener mayor síntesis proteica, cuando en realidad eso no ocurrirá, visto lo máximo que el cuerpo pueda hacer en ese aspecto. Obviamente, así como debamos comer proteínas El SUFICIENTE para estimular la síntesis proteica, debemos también estimular la insulina lo suficiente para que ella ejerza su función adecuadamente. Cualquier otros excesos ciertamente no serán convenientes.

conclusión:

En nada adelantar los picos de insulina frente a cualquier proceso anabólico que nos conviene. Los picos de insulina, muchas veces, están más asociados con el aumento de la adiposidad que con la síntesis proteica o incluso de glucógeno, mostrando que para esos, pequeñas cantidades y poca secreción de esa importante hormona ya son mucho más que suficientes.

Y usted, todavía cree en mitos de los años 80?

Buenos entrenamientos!

Artículo escrito por Marcelo Sendon (@marcelosendon)

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