El dolor que irradia en el antebrazo durante la ejecución de la rosca directa o scott puede ser indicio de epicondilitis.


La rosca directa es uno de los ejercicios más tradicionales y más utilizados para ganar fuerza y ​​masa muscular principalmente en el entrenamiento de bíceps, ya que ese músculo se vuelve agonista (es decir, es el agente principal en la ejecución del movimiento) en esta acción , y también es el responsable de la flexión de hombro y codo y la rotación superior del antebrazo.

Este ejercicio puede ser hecho en barra recta o en W y posibilita el uso de diferentes cargas de acuerdo con el tipo físico de la persona que está entrenando. La barra recta afecta un poco más la articulación del codo, pero alcanza el bíceps en su totalidad.

Sin embargo, la barra W modifica la angulación articular, reduciendo mínimamente la tensión del tendón, pero aumentando también la tensión y angulación del puño, y disminuyendo el alcance muscular o incluso enfocándose en una parte específica del músculo, siendo así, las dos formas tiene sus ventajas y descompensaciones.

El reclutamiento muscular excesivo y algunos errores en la ejecución de este ejercicio pueden implicar en diversas lesiones, entre ellas, la epicondilitis.

¿Qué es epicondilitis??


Epicondilitis es una inflamación , generalmente acompañada con micro rupturas de los tendones insertados en los epicóndilos (partes específicas del hueso) del codo, se produce generalmente por esfuerzos repetitivos y por exceso de uso articular, con sobrecarga de los tendones, que es lo que ocurre a menudo en la rosca directa. Causa dolor local, sensibilidad, a menudo edema y enrojecimiento.

El dolor de la epicondilitis puede irradiar hacia arriba o hacia abajo, dependiendo del grado de inflamación y puede aparecer en movimientos de la mano y de la muñeca, como por ejemplo abrir un pote o cargar bolsas. El dolor se inicia leve, pero con la continuidad del esfuerzo, ella va empeorando y se vuelve sí incapacitante.

  • Hay dos tipos de epicondilitis: el lateral y el medial. El lateral es cuando la inflamación se encuentra en el epicóndilo lateral (es decir, con los brazos estirados delante del cuerpo, es aquel que está orientado hacia el lado del exterior del codo, hacia abajo, llega al dedo mínimo), y Este también es muy conocido como codo de tenista, porque es muy común que los atletas de este deporte tengan esa patología.

También es el tipo de epicondilitis más encontrado en la población en general, por ser un poco más inestable que el medial, y así más susceptible a las lesiones. La epicondilitis medial está en el epicóndilo medial (se localiza cerca del lateral, pero volcada internamente en el codo) y esta lesión es conocida como codo de golfista, por ser común en este deporte.

Tratamiento de la epicondilitis

El tratamiento es gradual, ya que el tendón, por tener poca vascularización (sin aporte sanguíneo, es de difícil nutrición, lo que impide que los reactivos lleguen al lugar y disipen la inflamación, no facilitando su rápida regeneración), trae resultados más lento.

Es imprescindible un período de reposo, con tratamiento medicamentoso y fisioterapéutico, pudiendo hasta llegar a la inmovilización del miembro o proceso quirúrgico.

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La prevención de la epicondilitis en la rosca directa

1- Calefacción: inicialmente, el calentamiento antes de la rosca directa es esencial, pues es necesario preparar el cuerpo. En caso contrario, el tendón sufrirá una tensión abrupta y excesiva, lo que facilita la aparición de las micro rupturas.

2- Cargas: debemos tomar mucho cuidado con la carga a la hora del entrenamiento. Se debe aumentar lentamente y gradualmente para no sobrecargar la articulación.

3- Codo: ellos deben mantenerse inmóvil durante todo el ejercicio. Al moverlos el ejercicio no traerá los efectos deseados, pues su acción muscular es disminuida, y aún contribuirá al inicio de las micro-lesiones tendinosas.

4- Postura: sí, la postura también puede prevenir la epicondilitis. Por otra parte, no sirve entrenar bíceps, si los músculos estabilizadores de la columna no son lo suficientemente fuertes para sostener su cuerpo en ejercicios más pesados ​​como este.

La columna debe ser erecta y es importante no compensar la fuerza curvándola. La postura correcta va a posibilitar la mejor estabilización y mantenimiento del codo durante el movimiento, facilitando también la mecánica del ejercicio.

5- Intensidad del movimiento: también es un factor esencial, tanto para la mejor efectividad muscular del ejercicio y para prevenir posibles lesiones. Cuanto más lento sea, mayor será el período de tiempo de activación y solicitación muscular, es decir, resultados más rápidos. Esto también permite la mayor estabilidad del codo.

Debemos siempre estar atentos al movimiento que estamos haciendo, es mucho más difícil adquirir una lesión cuando estamos debidamente preparados y sabemos qué y cómo hacer, y todo eso, claro, siempre en conjunto con acompañamiento profesional.
nota

La epicondilitis no ocurre sólo en la ejecución del ejercicio de rosca directa, hay informes también de la aparición de la inflamación en la ejecución de la rosca scott. El procedimiento para evitar son los mismos indicados en la rosca directa, además del cambio de la barra recta por la barra en W.

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