¿Las mujeres deben entrenar iguales a los hombres?
formaciónLa respuesta a esta cuestión es sí y no. Este artículo explicará las razones de esto.
Por generaciones el sexo femenino fue visto como el sexo débil. Esto es simplemente mentira. La fuerza y la velocidad no son un monopolio masculino. Los hombres y las mujeres tienen la misma capacidad para desarrollar fuerza y velocidad. La mujer tiene casi la misma fuerza que el hombre, si los músculos de los dos sexos pudieran ser aislados en un ambiente y expuestos a los mismos estímulos musculares, ambos crecer a la misma velocidad. Pero cuando hablamos de hormonas y metabolismo, los ambientes varían entre el hombre y la mujer. La mujer tiene fibras musculares más pequeñas y generalmente tiene menos fuerza total en los músculos.
No hay entrenamientos específicos para un determinado sexo. Generalmente lo que funciona para un hombre, también funciona para la mujer. Como se mencionó anteriormente, la mujer tiene una habilidad biológica similar al hombre para adquirir fuerza, pero no conseguirá conquistar la misma cantidad de masa muscular debido a las diferencias hormonales.
- Hormonas y el Cuerpo
Las hormonas sexuales contribuyen críticamente a las diversas diferencias entre los sexos y también en la respuesta al entrenamiento. Ambos sexos producen hormonas de testosterona y estrógeno, pero la cantidad que se producen es significativamente diferente. Los hombres producen hasta 10 veces más testosterona y menos estrógeno que las mujeres. La mayoría de las culturistas femeninas de élite que aparecen en varias revistas de Fitness, logran conquistar aquella cantidad de masa muscular con la ayuda de los esteroides anabólicos androgénicos.
En la adolescencia las mujeres empiezan a excretar grandes cantidades de estrógeno al inicio de la pubertad, lo que genera un impacto significativo en el crecimiento del cuerpo. La cuenca se vuelve más ancha, los senos aumentan y el cuerpo comienza a acumular grasa. El estrógeno también aumenta la velocidad del crecimiento óseo, en el que termina en 2 a 4 años después del comienzo de la pubertad. Por lo tanto, las mujeres adolescentes crecen más rápidamente por algunos años, pero después no crecen más.
En el hombre la testosterona para de ser secretada en el nacimiento y vuelve durante toda la pubertad. Los hombres tienen un período mayor de crecimiento y generalmente alcanzan una estatura más grande. Cuanto mayor sea la testosterona que un hombre produce, mayor es la cantidad de masa muscular y ósea comparado con una mujer. Los hombres desarrollan hombros más anchos, caderas más finas y pectorales más extendidas, también tienden a depositar la acumulación de grasa en el vientre y la espalda, a diferencia de las mujeres que acumulan la grasa en las caderas y piernas.
Aunque la testosterona y el estrógeno son anabólicos, la testosterona es la principal responsable del aumento del tejido muscular e hipertrofia. Pero esto no quiere decir que las mujeres no puedan ganar masa muscular y fuerza.
- Músculos y Fuerza
En términos de fisiología y la habilidad de producir fuerza, los músculos son idénticos en el hombre y la mujer. La diferencia que existe es en la porción total de masa muscular, sólo el 24% de un cuerpo femenino típico está constituido de masa muscular, contra el 40% del cuerpo masculino.
La fuerza de los grupos musculares inferiores son similares en el hombre y en la mujer. Los hombres son más fuertes en las partes superiores debido al desarrollo avanzado de esta región, como se explicó anteriormente.
- conclusión
Naturalmente una mujer con producción de hormonas típica, nunca podrá conquistar la misma cantidad de masa muscular que un hombre, precisamente por este motivo las mujeres no deben quedar preocupadas por los "supuestos" efectos masculinizantes de la musculación. Como hemos visto, la principal diferencia entre el hombre y la mujer es la producción hormonal, en cuestión muscular fisiológica somos iguales.