Todos sabemos de la importancia de la vacunación en la vida de los niños. Pero con ella viene también las preocupaciones en relación a los efectos colaterales o posibles reacciones consideradas normales. Pensando en eso, vamos a listar cuáles son las principales vacunas que dan reacción para que los papas se preparen para reducir los síntomas y las molestias.

En los primeros meses de vida, son necesarias algunas vacunas que forman parte de la cartilla de vacunación infantil. Deben ser seguidas rigurosamente y dadas en el plazo indicado y en caso de dudas, siempre es bueno conversar con el pediatra.

Principales Enfermedades, Vacunas y reacciones

Vacuna de Varicela: La varicela es una de las enfermedades más comunes en la infancia, siendo también una de las más contagiosas. Las reacciones más comunes de la vacuna de varicela son: fiebre, enrojecimiento, erupción entre 10 a 21 días después de haber tomado la vacuna, inflamación localizada y dolorida.

Aunque es muy rara complicaciones relacionadas con la varicela, la vacuna es de extrema importancia. En algunos casos más agravantes pueden ocurrir infecciones bacterianas, cuadros de neumonía y encefalitis.

Vacuna de Hepatitis B: La hepatitis B es una enfermedad que afecta directamente el hígado y puede causar otras infecciones agudas. Una de las reacciones de la vacuna de hepatitis B son: dolores musculares, sensibilidad en el lugar donde se aplicó la vacuna además de dolores en las articulaciones y fiebre.

La vacuna contra la hepatitis B es de gran importancia porque se trata de una enfermedad altamente contagiosa y que puede causar complicaciones graves como: cirrosis hepática, hemorragias en el tracto digestivo, peritonitis bacteriana, carcinoma hepato-celular además del riesgo de que la infección se vuelva crónica.

Vacuna de Poliomielitis: La poliomielitis es una enfermedad infecciosa, que se transmite de persona a persona. Causada por un virus que vive en el intestino, la transmisión se da a través de la boca. Los niños más jóvenes que no siguen estrictamente hábitos de higiene tienen un riesgo aún mayor.

Las reacciones más comunes de la vacuna de poliomielitis son: dolores de cabeza, diarrea, dolores musculares e irritación en la garganta además de vómitos.

Vacuna Neumocócica: La neumocócica es una bacteria que viene a través de gotitas de saliva que se transmiten cuando la persona infectada estornuda o tos, por lo que es altamente contagiosa.

La mayoría de los niños que reciben la vacuna neumocócica pueden tener reacciones como: irritabilidad que es el síntoma más común y en casos aislados, puede ocurrir neumonía, meningitis, cuadros de fiebre y pérdida de apetito.

Vacuna triple viral: Es una vacuna preparada para combatir tres enfermedades: el sarampión, la parotiditis y la rubéola. Las vacunas con virus vivos atenuados no deben aplicarse en niños con enfermedades congénitas o deficiencias.
Las reacciones suelen surgir de 7 a 12 días después de haber tomado la vacuna. En el lugar de la aplicación son comunes los gánglios inflamados y el niño presenta fiebre, mobilidad y erupción.

Vacuna Influenza: La gripe es una enfermedad viral que se transmite a través de la tos o el estornudo de la persona infectada. El virus se caracteriza en 3 tipos: A, B y C. Sin embargo, sólo los de tipo A y B están relacionados con las grandes epidemias que andan ocurriendo en la actualidad.

Después de tomar la vacuna de la gripe es común tener reacciones como: dolor intenso en el lugar de la aplicación, tos, dolor de cabeza. En general, los síntomas desaparecen alrededor de 2 días, si persiste es necesario buscar un médico.

Vacuna Rotavirus: El rotavirus es un virus fácilmente transmitido y muy recurrente, principalmente en niños de 6 a 2 años de edad debido a la fase oral de poner todo en la boca, incluyendo objetos.

Después de tomar la vacuna rotavirus es común presentar reacciones como: dolor in situ, endurecimiento del área de aplicación, enrojecimiento, fiebre e irritabilidad.

Cómo evitar la reacción de la vacuna?

Desafortunadamente no es posible evitar las reacciones de la vacuna, pero podemos con algunos consejos para suavizar el sufrimiento de nuestros bebés y niños. Por ejemplo, en caso de enrojecimiento en el lugar de aplicación, podemos con la ayuda de un paño y agua tibia, pasar delicadamente por 3 veces al día en el sitio hasta mejorar la incomodidad.

En casos de cuadro de fiebre es recomendable dar el antitérmico siempre dentro del período indicado y en la dosificación indicada por el pediatra. Si el niño está enfermo o presenta signos de fiebre, se indica que espere hasta que se recupere el niño para que pueda tomarse la vacuna.

El uso de algunos medicamentos también puede influir en la baja de la inmunidad del niño. En caso de tratamiento recomendado conversar con el pediatra y solicitar la liberación para tomar la vacuna o si debe esperar el final del tratamiento.

Mezclar el componente de la vacuna con algunos medicamentos pueden dar ciertas complicaciones o incluso "maquillar" los síntomas. Después de la aplicación de las vacunas es necesaria una observación total

Es importante advertir que algunos niños pueden sufrir de alergias a algunos componentes de las vacunas, por lo que es necesaria una observación rigurosa después de cada aplicación. En caso de signos de alergia, busque inmediatamente un servicio de atención.

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