El entrenamiento de agilidad es una de las bases para la preparación para las luchas. Algunos puntos deben ser alineados y adaptados, para que usted pueda tener mejores resultados.


El mundo de las luchas involucra muchos elementos. En la preparación física, específicamente, siempre tenemos desafíos constantes.

En el MMA, ya sea en luchas tradicionales, siempre tenemos una gran importancia de los elementos físicos. La agilidad es uno de los principales. Como calidad física, la agilidad se encuadra en prácticamente todas las luchas. Es fundamental para los cambios de posiciones, golpes y defensas. Por eso, dentro de la preparación física de las luchas, es fundamental tener estrategias que involucran la mejora de la agilidad.

Sin embargo, a diferencia de lo que ocurre con algunas otras cualidades físicas, el propio entrenamiento de las luchas, en general, implica mejora de la agilidad.

Por eso, en la preparación física, buscamos apenas optimizar eso y mejorar las cualidades físicas que dan la base para la agilidad.

Pero antes de eso, hay que entender de qué forma podemos trabajar la agilidad, dentro del contexto de las luchas!

Entrenamiento de agilidad para los luchadores, partiendo del básico

Básicamente, como propone el autor Manoel Tubino, la agilidad es la capacidad física que permite cambiar la posición del cuerpo en el menor tiempo posible. En este contexto, veremos que en los entrenamientos de lucha, tenemos trabajos constantes de agilidad.

Pero como, en la preparación física, esto puede ser optimizado?

Antes de pensar en ello, tenemos que entender que existen, antes de la agilidad, cualidades físicas de base. Fuerza, resistencia, velocidad y coordinación motora son las cualidades físicas de base. Sobre su trabajo, es que conseguimos mejorar las demás cualidades físicas.

En este contexto, la agilidad es dependiente de éstas. De forma más directa, de la fuerza, velocidad y coordinación motora. La resistencia, ayuda a mantener los niveles de agilidad por más tiempo, pero poco interfiere en su acción aislada.

Pero fuerza, velocidad y coordinación, están directamente ligadas a la agilidad. Fuerza, para que las fibras musculares desarrollen la capacidad de contracción necesaria. Velocidad, para que las unidades motoras envuelvan los mecanismos adecuados. Coordinación motora, para la mejora de la eficiencia del movimiento y con ello, la velocidad de desplazamiento.

De esta manera, dentro de su planificación de entrenamiento, es importante que la estructura preserve esta secuencia. Si partimos directamente al entrenamiento de agilidad, por ejemplo, tendremos poca evolución.

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Además, en la mayoría de las luchas es natural el aumento de la agilidad. Por eso, mucho más importante que muchos entrenamientos específicos, es la utilización de entrenamientos que mejoren las cualidades físicas de base. Cuando conseguimos un buen nivel de entrenamiento de éstas, partimos para los entrenamientos más específicos.

Para que esto sea más claro, voy a usar el ejemplo del boxeo. Uno de los puntos más importantes del boxeo es la esquiva. Esta, implica mucha agilidad.

Si partimos directamente al trabajo de agilidad en la esquiva, sin una preparación, no tendremos grandes avances. Por eso, es interesante mejorar las condiciones de las cualidades físicas de base primero. Con ello, al pasar de los entrenamientos, la agilidad se mejorará considerablemente. En este punto, es que tendremos entrenamientos más específicos.

Teniendo todo esto en mente, es importante buscar la mejor organización del entrenamiento de agilidad para las luchas, de forma que sea posible mejorar el resultado.

Cómo optimizar el entrenamiento de agilidad para los luchadores?

Básicamente, dentro de la preparación física para las luchas, tenemos que tener en cuenta algunos aspectos. El primero de ellos, es la participación del entrenamiento de la lucha en específico, en la carga total de entrenamiento.

Usando el ejemplo de la esquiva del boxeo, un entrenamiento específico para este propósito, ya se encuadra en lo que la preparación física propone. Por eso, debemos tener en cuenta la carga de trabajo de este entrenamiento en cuenta también.

Después de eso, es que podemos partir para entrenamientos más específicos, siempre respetando un buen período de descanso, para que ocurran mejoras en la parte motora y física.

Hablando específicamente del entrenamiento de agilidad, dentro del contexto de la preparación física, es importante que algunos puntos sean observados.

1- Siempre se centra en la especificidad de la lucha

El entrenamiento de agilidad debe estar insertado en las necesidades del luchador. Por eso, el entrenamiento de agilidad precisa, seguir uno de los principios del entrenamiento deportivo: la especificidad. Básicamente, cada lucha tiene sus particularidades. Tenemos que desarrollar las cualidades físicas, incluyendo la agilidad, dentro de ellas. Esto hará que el rendimiento del atleta sea optimizado.

Por eso, todo el entrenamiento de agilidad debe ser pensado para las necesidades que la lucha impone. No copie entrenamientos de otras modalidades o simplemente repita ejercicios. Busque entender cómo cada movimiento sucede y su importancia en la lucha y entonces, encuentre estrategias para desarrollarlos.

2- Mezcla carga con velocidad

Una de las formas de mejorar la agilidad, es envolver dos calidades físicas de base en el entrenamiento. Fuerza y ​​velocidad, cuando desarrolladas dentro de la especificidad del deporte, traen una mejora considerable en la agilidad.

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Utilice elásticos, mancuernas, chalecos de carga y lo que sea más viable, para envolver velocidad y carga en los movimientos específicos de la lucha. En el momento en que deje de usar estos implementos, sentirá una mejora de la agilidad. En general, este tipo de entrenamiento "fuerza" a las fibras y unidades motoras a mejorar sus funciones y con ello, tenemos una ganancia de agilidad considerable.

3- Aumente la velocidad gradualmente

Uno de los grandes errores de los luchadores al hacer el entrenamiento de agilidad, es intentar aumentar la agilidad sólo. Como ya mencioné, la coordinación motora es una de las bases de la agilidad. Por eso, en movimientos más complejos, es importante comenzar con una velocidad más fácil e ir aumentando poco a poco. Con ello, el cuerpo consigue "asimilar" mejor el movimiento y con ello, automatizarlo.

4- Busque mejorar los movimientos de forma fragmentada y después, integralmente

Muchos movimientos de las luchas son complejos e implican varios movimientos más pequeños. Para la mejora de la agilidad, es importante mejorar estos movimientos más pequeños. Por ejemplo, en la esquiva, el juego de piernas tiene una gran importancia. Además, tenemos la cuestión del tronco, los hombros y la cabeza. Haga ejercicios para cada uno de estos elementos, para entonces, partir hacia el movimiento más generalista. Esto ayudará mucho en la mejora de la agilidad.

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La mejora de la agilidad en los luchadores es fundamental para el rendimiento. Pero, como quedó claro, es importante que las demás cualidades físicas de base también sean desarrolladas. Buenos entrenamientos!