Todos necesitamos lugares o contextos sociales que nos dejen más felices. ¿Quién realmente encara la musculación con seriedad, antes de cualquier cosa es feliz dentro de la academia!


Usted tuvo un día infernal, con su jefe "llenando su saco" todo el día, lleno de problemas y está completamente destruido. No ve la hora en que su expediente termine y usted pueda ir a su casa. La tan esperada hora llega y usted sale, torciendo para nunca más tener un día como éste. Llega en casa, sólo pensando en jugar en el sofá y quedarse allí por el resto del día. Al llegar a casa, usted recuerda que es el día del entrenamiento que menos le gusta hacer y al instante, su cerebro comienza un sabotaje para que usted no vaya a entrenar. En este momento, usted tiene una decisión para ser tomada, que a pesar de parecer simplista es muy importante: ir o no entrenar? Si elige la primera opción, puede estar seguro de que está haciendo lo correcto!

La escena de la película Rocky II, con Silvestre Stallone, grabada en Filadelfia (Foto: Reproducción)

Quien entrena de verdad, necesita sentirse feliz haciendo eso! Nadie es competente y alcanza el éxito en algo por pura obligación. Sólo quien se siente feliz y realizado entrenando es que va a tener disposición después de un "día de aquellos", para ser olvidado, todavía ir "sufrir" en la academia o en el parque. Para ayudarte a encontrar la felicidad en la academia, mira algunas situaciones que te pueden ayudar en el día a día.

4 consejos para tener éxito en sus objetivos

1 ° Establezca una meta de asiduidad:
Ya he tenido varias experiencias positivas con mis alumnos, trazando metas de asiduidad. Por ejemplo, si la persona se dispuso a entrenar 4 veces por semana, durante 3 meses, yo cobra una multa en cantidad simbólica de cada falta que la persona tenía. Usted puede hacer esto con cualquier persona cercana a usted. Puede ser su instructor, su pareja, su novia o novio o cualquier otra persona cercana. De esta manera, usted se "obligará" a ser asiduo (a) y con el tiempo, eso se convertirá en un hábito que le dejará mucho más feliz!

2 ° Sea más fuerte que su mejor excusa:
Si usted deja de prestar atención a sus excusas, seguramente será mucho más feliz que va a entrenar! Nuestro cerebro tiene como característica heredada de la época de las cuevas, de proteger nuestro cuerpo de cualquier esfuerzo que no fuera visto como necesario. Por lo tanto, hasta que el cerebro entiende que su entrenamiento es un esfuerzo necesario, él va a intentar de todas las maneras sabotearlo. Sólo con la práctica, usted conseguirá vencerlo y convertirlo en su aliado!

3 ° Programe mentalmente:
Aunque esté con pereza, piense en la sensación de gusto que el final de un entrenamiento hecho con calidad proporciona. ¡Vaya programando durante el día, para que usted vaya a entrenar en la academia con gusto, con voluntad y principalmente, con felicidad! Nosotros somos seres que respondemos a estímulos y por lo tanto, si son positivos, tendremos respuestas positivas! Durante el día, enumere las cosas que te dejan feliz al ir a entrenar, repítalas varias veces y muéstrales para ti mismo, cuánto la academia puede ser un lugar de felicidad para ti!

4 ° Celebre los objetivos alcanzados:
Trace objetivos a corto y largo plazo. Cuando alcanza alguno de ellos, celebre mucho, pues sólo tú sabes lo que necesitaba dedicarse para alcanzarlo. ¡Celebre, muestre para las personas cercanas a usted y vea cuánto es bueno alcanzar un objetivo! Así, con toda certeza la academia se convertirá en un templo para usted!

Son medidas simples, de aspectos actitudinales, pero que en el contexto general van a ayudar mucho a alcanzar sus objetivos y principalmente, te harán sentir placer en ir a la academia entrenar! Buenos entrenamientos!