¿Por qué entrenar y no malar?
MusculaçãoEntiende la diferencia entre entrenar y marear y la responsabilidad de llevar la musculación en serio, como un estilo de vida y no sólo un paso tiempo.
El que está iniciando en el mundo de la musculación, tal vez cree que entrenar y mellarse son sinónimos y que cuando usted hace uno, acaba por lo tanto, haciendo el otro. Pero los términos son totalmente diferentes y usar uno u otro implica una cuestión de actitud, y no sólo en mero intercambio fonológico. Según el diccionario Michaelis, entre los tantos significados del término punto, uno de ellos se enmarca en nuestro tema que es "Ejercitar (se), practicando gimnasia, musculación u otras actividades físicas". Sólo para constar, uno de los significados presentados es "Reunirse, según la hora, en ciertos lugares de los cercados, para pastar (hablando del ganado). Así, aquellos que se reúnen para conversar y matar tiempo en la academia en lugar de entrenar. En el caso de que se trate de una actividad física, da una connotación de ocio, de algo hecho sin compromiso y que no es tomado en serio por los practicantes. En el caso de que se trate de una persona que no se encuentre en el lugar de trabajo, no se le ocurrirá. Vuelve a subrayar, para algunos es sólo un cambio de términos, pero es este cambio que acarrea en un cambio de postura y de actitud.
El entrenar es muy diferente. Es allí donde se separa la cizaña del trigo. El que entrena tiene prioridad, tiene objetivos a alcanzar y sabe de la importancia de cada sesión de entrenamiento. El que entrena sabe que tendrá que renunciar a ciertas regalías para alcanzar sus objetivos, tendrá que renunciar a momentos de ocio y de descanso en busca de sus metas. El entrenamiento es algo estructurado, que tiene inicio, medio y finalidad, entrenar es hacer algo con respaldo científico y que no se deja influenciar por modismos y "dietas y entrenamientos de famosos". El entrenamiento tiene planificación, estructura y es hecho por un profesional capacitado, y debe ser ejecutado con una regularidad mínima, que en el caso de la musculación, es de por lo menos 3 sesiones semanales, pero que puede llegar hasta 7 o 9, dependiendo del caso y de los objetivos. Además, quien entrena, hace pruebas para evaluar su desarrollo y saber si el entrenamiento está surtiendo el efecto deseado.
Tal vez usted encuentre que entrena y sólo malla. Si usted está en duda, me responda, cuántas veces a la semana usted entrena? ¿Cómo hace para acompañar sus progresos? ¿Usted es acompañado por alguien competente? ¿Usted cambia su sesión de musculación por cualquier otra comisión? ¿Su alimentación y su descanso tiene relación con su entrenamiento? ¿Usted ingiere bebidas alcohólicas sin ningún pudor o arrepentimiento? Si usted afirma que no hace acompañamientos de progresos, no cuida del descanso y de la alimentación e ingiere bebidas alcohólicas en grandes cantidades y sin remordimiento, siento informarle, usted es un "malhador".
Si usted se preocupa por todos estos componentes y sabe de la importancia de tomar en serio su entrenamiento, enhorabuena, usted realmente entrena y sabe que sus metas son del tamaño de su disciplina y persistencia.
En primer lugar quiero dejar claro, que la mayoría de las veces, las personas que mierda, tratan de desanimar a los que entrenan, diciendo que eso no es vida, que no vale la pena y que usted es fisurado o que es viciado en eso. Pues bien, sepa que quien no alcanza el éxito, la mayoría de las veces no le gusta ser solitario e intenta traer el máximo de personas a su entorno. No caiga en esta trampa y recuerde que los resultados valdrán cada gota de sudor y que cada momento o situación que usted se privó va a reflejar en su cuerpo y en su carácter. Por eso todo, buenos entrenamientos!